Dejan Turquía y Siria rescatistas extranjeros
Estambul.- A medida que disminuyen las probabilidades de encontrar sobrevivientes 10 días después de la tragedia, algunos equipos de rescatistas extranjeros comienzan a marcharse de Turquía.
La agencia turca de manejo de desastres, AFAD, elevó el número de fallecidos a causa del terremoto a 36 mil 187. Esto hizo que la cifra de decesos en los dos países se incrementase a 39 mil 875.
Sólo en Turquía, más de 108 mil personas resultaron heridas en los temblores del 6 de febrero. Es probable que la cifra de muertos siga aumentando mientras que algunos socorristas que permanecen en el país buscan más cadáveres entre las ruinas de los miles de edificios caídos.
En el aeropuerto de Estambul, un grupo de pasajeros aplaudió en señal de gratitud a un equipo de 27 rescatistas griegos que regresaban a su país tras poner fin a su misión de búsqueda de sobrevivientes en Adiyaman, una de las ciudades más golpeadas.
En declaraciones a la agencia noticiosa estatal turca el miércoles en al noche, el jefe del equipo, Ioannis Papastathis, dijo que se marchaba de Turquía con “recuerdos inolvidables”.
“Por una parte estaba el amor y la cálida acogida de la gente, por la otra el sufrimiento. La destrucción era enorme. El clima era frío. Todo esto me afectó mucho”, señaló Papastathis según fue citado por Anadolu.
Cerca de 8 mil rescatistas y cooperantes de 74 países seguían asistiendo a los equipos turcos en el operativo de búsqueda y rescate, dijo el Ministro turco de Exteriores, Mevlut Cavusoglu. Alrededor de 4 mil 200 operarios de 15 países han regresado ya a sus casas.
“Me gustaría darle las gracias a todos y cada uno de ellos”, afirmó Cavusoglu durante una conferencia de prensa conjunta con su homólogo de Costa Rica.
Persiste la esperanza
En tanto, los socorristas turcos extrajeron este jueves a una joven de 17 años de entre los escombros de un edificio, aunque cada vez hay menos esperanzas de encontrar sobrevivientes.
Aleyna Olmez fue rescatada 11 días después de que se produjera el terremoto.
“Parecía estar bien. Abrió y cerró los ojos”, explicó a la AFP Ali Akdogan, un minero que participó en las labores de rescate en Kahramanmaras, una ciudad próxima al epicentro del sismo.
“Hemos estado trabajando aquí, en este edificio, desde hace ya una semana. Vinimos con la esperanza de escuchar algo. Nos alegramos cuando encontramos algo con vida, aunque sea un gato”.
El tío de la chica, llorando, abrazó uno por uno a todos los socorristas diciéndoles: “Nunca les olvidaremos”.
Pero, después del rescate, los militares turcos instaron a los medios y a los lugareños a abandonar la escena, pues los equipos de socorristas empezaron a retirar cuerpos de entre los escombros.
Con información de: reforma.com